Entrevista a Reynaldo Castro
Presenta su libro «Xuxuy en el centro del mundo»
esta noche en Coquena
Por Lic. María Eugenia Montero
Reynaldo Castro presenta el libro “Xuxuy en el centro del mundo” hoy a las 20.30 en el Centro Cultural Coquena (Güemes 640).
Enlace Cultura conversó con él sobre este nuevo trabajo que pone a consideración del público.
La presentación se realizará con la presencia de Aldo Parfeniuk (autor de unos de los prólogos) y Castro dialogará con las y los músicos y cantores Caro Escobar, Nora Benaglia, el dúo Tojra y Franco Paredes, en una conversación informal referida a algunos de los textos que aparecen en el libro y la referencia a canciones contemporáneas. Además, la locutora Elisa Stella prestará su voz para interpretar algunos poemas. La coordinación de esta presentación estará a cargo de Ari Tabera.
El libro se completa con un perfil que escribió la escritora Fernanda Agüero de Salta, y con esta obra, la editorial 500 Armas inicia su tarea.
- Vos decís a modo de presentación de esta obra “he abusado demasiado del uso del nombre de nuestra provincia en mis libros”, y justamente en éste se presenta otra vez ¿por qué usas tanto la palabra “Jujuy” y en especial en este libro, “Xuxuy?
- Este libro surge de una actividad que realicé el año pasado. Una capacitación que di en la Universidad Nacional de Salta, y cada vez que llegábamos la escritora y plástica Elisa Barrientos, el realizador Adrián Ogando, o yo, nos decían “ahí vienen los jujeños centristas”, porque todos tenemos una posición muy fuerte con las obras que hacemos en Jujuy. Y entonces me pareció importante entonces rescatar una palabra con un posible origen anterior, y decir que uno sale a tratar de hablar de las cosas que nos pasan en Jujuy, de las relaciones que nos suceden y tratar de instalar eso, por una fracción de segundos quizás, en el centro del mundo. Enunciar muy fuertemente cosas que pasan acá, con esa pretensión, que capaz que lo alcance nunca, pero sí está el intento de lanza una obra, y hablar cosas que a mí me movilizaron mucho y que tienen necesidad de ser escuchadas por otros, y por eso abuso mucho de esta recurrencia a la localía.
- Tenés una intención constante de revalorar, recordar, la historia, la cultura, nuestro orígenes, y de cómo nos paramos para defender todo esto. En este libro hay poemas mezclados con narrativa ¿En este libro qué es lo que sientes que lograste?
- Antes estaba muy separada mi vida como escritor, investigador y como crítico de ciertos hábitos políticos, y en este libro he mezclado todo eso. Hay poemas que tienen fragmentos narrados, hay poemas donde hablo de algunos políticos, poemas de amor, de desamor. Me parecía que a esta altura de mi vida, ya tengo 54 años, valía la pena empezar a mezclar todo los géneros y dejar de ser el yo dividido, el editor, el investigador, el poeta, en crítico y tratar de unificar eso.
- Eso es más fácil o más difícil a la hora de ordenar y armar un trabajo?
- Es más difícil, porque cuando uno se pone los límites, sabe cómo va a recorrer el camino, son como bici sendas, peatonales, autopistas. Pero acá dije “no, voy a mezclar”. Y este libro se lo dediqué a Ernesto Aguirre -poeta fallecido el año pasado- porque fue una especie de hermano mayor para mí y que quise mucho. Y en la foto que incluyo, que le hace una becaria de un proyecto de extensión universitaria, y entonces se puede ver parte del trabajo que hicimos con la universidad de extensión, de investigación, y empezamos a mezclar esa cuestión.
- Tenés dos prólogos para esta obra…
- Sí, dos porque cuando terminé el libro, dije le voy a pedir a un par de amigos que siempre están muy ocupados, porque seguramente alguno me va a decir que no, y les mandé el pedido en simultáneo. Y los dos me dijeron que sí, en simultáneo, y quedaron los dos porque me pareció que los dos se complementan mucho. Uno pertenece a Aldo Parfeniuk, que es un poeta y filósofo de Córdoba, que conocí en alguna oportunidad, y que va a estar en la presentación. Conoció a Manuel j. Castilla y al Cuchi Leguizamón y pone los pies en el barro por donde anduvieron estos dos poetas salteños.
- Vos decís que en tu libro hay ese “olor de lo latinoamericano” al decir de Kusch (Rodolfo). “que es un olor que molesta tanto a los olfatos delicadamente trabajados”.
- Sí, porque en el libro hay bastantes malas palabras, ciertas provocaciones también y que tienen que ver con esa cuestión de los pueblos originarios porque hace un tiempo empecé a dar clases en una tecnicatura para pueblos originarios, y en especial los alumnos que tengo en Abra Pampa, me enseñaron mucho. Cada vez que voy vuelvo con las pilas bastante cargadas, y cuando vuelvo el colectivo ya vengo escribiendo algunas cosas, que seguramente van a salir también en algún
- ¿Y el otro prólogo?
- Es de Jorge Espínola, que es un poeta que conocí en Trelew, nos vimos una sola vez en la vida, a él le tocó leer antes que yo en un encuentro. Y yo sentí que los textos de él y los míos vibraban al unísono. Él tiene un par de años menos que yo y tuvo una infancia difícil, se crió en la calle, y luego tuvo la oportunidad de formarse, y actualmente está terminando un doctorado en Letras en la Universidad de Chile. En estos momentos está por Francia. Es un excelente poeta y él en el prólogo habla un poco de “esos jóvenes que fuimos” porque cuando nos conocimos, ambos estábamos abandonando nuestra primera juventud.