Conmemoraron el Día Nacional del Ceremonial y Protocolo en Casa de Gobierno
Participó Ana María Azua, jefa del Área de Ceremonial y Protocolo del Poder Legislativo.
En el histórico Salón de la Bandera de Casa de Gobierno, se llevó a cabo la ceremonia en conmemoración del Día Nacional del Ceremonial y Protocolo, encabezada por el gobernador de la provincia, Carlos Sadir, y el intendente de la ciudad capital, Raúl Jorge.
Ceremonialistas de distintos organismos del Estado y representantes del interior de la provincia se dieron cita en este acto, que tuvo como eje central el reconocimiento por parte del Gobierno provincial a quienes dedican su vida a esta noble profesión. La emoción y el orgullo se reflejaron en cada intervención, destacando la trascendencia de un rol que muchas veces trabaja desde el silencio con enorme compromiso.
En ese sentido, Ana María Azua, jefa del Área de Ceremonial y Protocolo del Poder Legislativo, expresó su profundo agradecimiento y reflexionó sobre el valor de esta función silenciosa pero esencial en la organización institucional: Muy orgullosa de ser ceremonialista y de pertenecer al Poder Legislativo. Agradezco al Gobierno de la provincia por este acto en reconocimiento a todos los colegas que trabajan en distintos puntos del territorio, expresó.
Azua también destacó el trabajo diario de su equipo: Estamos en todos los detalles, en cada acto, siempre colaborando al frente de todo, señaló.
Con muchos años de trayectoria, rememoró sus inicios y su paso por diferentes gestiones legislativas: Empecé en el gobierno del Vicegobernador Fernando Cabana y tengo el honor de seguir cumpliendo la misma función actualmente con el señor Vicegobernador Alberto Bernis, compartió.
Por su parte, el Coordinador General de Ceremonial de la Gobernación, Rodrigo Rojas, valoró la presencia del gobernador Sadir y del intendente Jorge, y subrayó la relevancia del trabajo ceremonial en todos los ámbitos.
Rojas también dejó una frase que sintetiza la esencia de la profesión: Como decimos nosotros, cuando estamos no se nota, pero cuando no estamos se nota mucho más. Es un trabajo desde atrás, en silencio, con discreción, dedicación y responsabilidad.
Por último, Rojas destacó las experiencias compartidas a lo largo de los años y extendió un cálido mensaje para quienes ejercen esta vocación: Una profesión que demanda tiempo, compromiso y responsabilidad. Muchas veces pasamos más tiempo con nuestros compañeros que con nuestras propias familias. Nuestro saludo y reconocimiento para todos los que eligen este camino con pasión y entrega.
